El gobernador morenista, Alfredo Ramírez Bedolla, pidió a los tortilleros no dejarse intimidar por la delincuencia y reabrir sus negocios.
El presidente municipal mencionó que hasta el momento no se tienen denuncias por parte del sector para las investigaciones, si es amenaza o extorsión.
El gobernador del estado hizo un llamado a los trabajadores para que abrieran con normalidad, sin embargo, los trabajadores de la masa y la tortilla se negaron a abrir ya que señalan que les llegó un comunicado del crimen organizado de que si abrían "les iría muy mal".
Ante esto decenas de tortillerías cerraron sus puertas en Uruapan, Michoacán, ante el presunto "cobro de piso" y extorsiones por parte de grupos delictivos.
Por su parte, el alcalde de este municipio informó que no se tienen denuncias de los comerciantes de la tortilla, sin embargo, se reunirá con el gobernador del estado para analizar el tema y reforzar la estrategia de seguridad.
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